A Miguel le ha crecido un nuevo dedo en cada mano mientras dormía...
Una noche en la mano derecha y otra noche en la mano izquierda.
Creyó que era cosa del Diablo. Fué al confesionario y se lo dijo al cura.
El cura, que era algo sordo, no entendió bien que cosa le había crecido.
Por las dudas, le mandó rezar treinta avemarías y veinte padrenuestros.
Ahora, luego de rezarlos, Miguel, feliz y con la conciencia limpia,
todas las noches cuenta sus dedos.
Es una forma de comprobar que su pequeño tesoro no ha mermado.
¿Con cuál dedo hace Fuck You?
ResponderEliminarA ver a la hora se sumar, entiéndase contar con los dedos, es una gran ayuda porque tienes más dedos para la faena. Sexualmente…¡Una maravilla!
Pero para cortarse las uñas le llevará más tiempo.
¿Adónde se pone el anillo de casado?
Ah, y tiene más posibilidad de agarrarse “el dedo con la puerta”
En fin, que si Miguel es feliz…¡Yo también soy feliz!
Besos Lucre.
Los curas suelen ser sordos, (y pedófilos)
Miguel dijo que hará el fákiu con el dedo derecho nuevo.
EliminarEl anillo lo va a llevar en un bolsillo... pero es feliz.
besos
jaja buenisimo
ResponderEliminarGracias Lapislazuli!
EliminarJuraría que había otro gatito cuando vine. ¡No abras el agua caliente!
ResponderEliminarMe comí una coma, era: A ver, a la hora se sumar bla-bla.
jiji.
Ando paseando.
Sí, el anterior era Pancho, el hermano del que está ahora, que es Bartolo... ;-)
EliminarLo de tener seis dedos debe ser una anomalía genética bastante común puesto que hay hasta un apellido que lo inmortaliza.
ResponderEliminarBesos.
Hay muchos apellidos de ese nombre, pero a éste no es por el apellido, sino porque le creció un dedo...
Eliminarbesos
Me alegro por Miguél, si se pone a aprender a tocar el piano, con once dedos, va a dejar a Lan Lan a la altura del betún.
ResponderEliminarY comprale un cojín al gato en el chino de la esquina de tu calle, da un poco de pena verlo dormir así en el lavabo.
Besos.
Lo ha visitado una profesora de piano para enseñarle a tocarlo.
EliminarEl gato del lavabo ya se fué. Ahora vino su hermano, Bartolo...
besos
Un poco es aprender a amar lo que nos es dado. Algunos lo ven desgracia, otros, tesoro. Un abrazo.
ResponderEliminarAsí es. En este caso Miguel lo considera un tesoro.
Eliminarabrazo
Desde luego que el cura sirve de poco para estos temas. un abrazo
ResponderEliminarfus
El problema del cura, es que no entendió que le creció y si era pecado, por su sordera.
Eliminarabrazo
Este hombre tendrá que hacerse los guantes a medida....
ResponderEliminarAdemás de los guantes a medida, tendrá que conseguir un nueva bola de boliche... ;-)
Eliminar¡¡¡Joerrrrrrrrrrrrrrr¡¡¡ Pues si me pasa a mí eso, me lo hago cortar, te lo juro.... No creo que me manejase bien yo con tanto dedo. Creo que 5 son los justos :D
ResponderEliminarDe todas formas, a Miguel se le ve super contento eh?? No sé si será por el dedo extra en cada mano o por la conciencia tan tranquila que se le ha quedado después del repaso del cura... Igual voy a confesarme y me ahorro el disgusto del dedo...
Un beso fuerte, Lucre
Siempre es bueno que sobren a que falten y el consejo del cura le ha dejao la conciencia tranquila y ahora está contento con sus dedos... ;-)
Eliminarun beso Novicia
Decidió que era cosa del Diablo, cosa del Diablo...cuánto daño hacen esos pensamientos. Todo lo que es un poco raro es ya del lado oscuro. En fin. La solución del cura dejó muy contento a Miguel, ¿no? Eso está bien. El Diablo ha quedado olvidado.
ResponderEliminarBesos, Lucrecia!
Cuando nos sucede algo anormal o desconocido, siempre pensamos en lo peor o culpamos al Diablo. Menos mal que están los curas para tranquilizarnos... ;-)
EliminarBesos Phoebe
ma da dove prendi quest cose ? senzasionali!!!!
ResponderEliminarbaci
Queste idee vengono dalla mia mente fantasiosa e stravagante...;-)
Eliminarbaci Myra
Belo texto!!!
ResponderEliminarÈ melhor ganhar dedos , porque eles podem ser usados de diversas formas:)))
È pior perder dedos:)))
Bacione per te cara!
É muito bom ter muitos dedos, porque você pode jogar o piano e pintura ao mesmo tempo...;-)
Eliminarbeijos