La calle devora sus pasos apurados, mientras el plomizo gris de la tarde con llovizna,
le empapa los hombros.
Ya no llora y al cruzar la próxima calle, aparece de la nada un coche que la atropella
y no se detiene.
María muere por segunda vez. Sin decir palabra.
Ya había muerto de amor una hora atrás cuando él la dejó.
Eran las siete de la tarde.
¡Hacía tanto frío para seguir en soledad!...
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лукреция
pues yo no me muero por nadie!!!
ResponderEliminar¿Cuántas veces habremos muerto,y resucitado por amor?
ResponderEliminarLastima por María.el coche, no le dio tiempo, para volver a resucitar...como siempre, cuando se muere por amor
Besossssss
Muy trágica te veo hoy, Doña Lucrecia. Pero esa enfermedad terrible de la "soledad" es más abundante de lo que se piensa por muchos y causa también, en zonas rurales aísladas, de abundantes suicidios por no poder soportarla.
ResponderEliminarNo debería de haberse muerto, Lucrecia¡¡¡
ResponderEliminarAl menos no tantas veces¡¡
Besos.
No se puede andar tan distraída por esas calles de Dios. Hay mucho desaprensivo dispuesto a cargarse al primer peatón que se cruce y echarle la culpa a la lluvia.
ResponderEliminarComo si no quedase más esperanza después de la primera muerte... Un abrazo.
ResponderEliminarSiempre he dicho que para pasear escuchando el walkman, hay que ser cuidadoso y mirar antes de cruzar la calle.
ResponderEliminarUn beso, después de mirar a derecha e izquierda.
Ese coche habrá respondido a un llamado interno de María. Y la Parca acudió a la cita.
ResponderEliminarUn abrazo.
aprecciate your blog kisses albert
ResponderEliminarLa primera muerte tenía cura. La segunda me temo que no. Es mejor no perder el norte, ni la precaución, por nadie.
ResponderEliminarBesos
Suelo pensar en cada una de todas las muertes que he tenido...
ResponderEliminarAbrazo
La muerte sólo tiene importancia, en la medida en que nos hace reflexionar sobre el valor de la vida.
ResponderEliminarGracias a tod@s por vuestros comentarios.
abrazos
me gustó! (comentario poco imaginativo pero cierto)
ResponderEliminarHay momentos en el que nos desvivimos por otra persona que te olvidas de lo más importante: respirar y estar.
ResponderEliminarun abrazo
la muerte muchas vezes es un bien...para que sofrir demais!!!
ResponderEliminarlucrecia querida, FELIZ ANO, no estuve muy bien..y la muerte de un gran amigo mio, no ayuda...
besos muchos besos querida Lucrcia!!!!
lucrecia querida, un felicissimo ano nuevo para ti..
ResponderEliminarno he venido a verte pqe no ando muy bien, y ahora pior por la muerte de un gran amigo mio...
besossss, amiga querida