Juan y David están de pie, frente a frente. Juan habla sin pausa, mientras agita las manos como para dar más sentido a lo que dice.
David lo escucha con atención, pero no mira las manos, sino los ojos de Juan y por momentos, la boca.
De vez en cuando, asiente con un movimiento débil de la cabeza.
........
Una diminuta mosca de color fucsia, asoma de la nariz de David y en un breve e inadvertido vuelo se posa en la oreja derecha de Juan.
La diminuta mosca fucsia desaparece dentro de la oreja de Juan.
Juan, de a poco empalidece y comienza a perder el control de sus palabras.
De pronto, Juan, deja de hablar y baja las manos.
Unos segundos después cae el suelo. Su cadáver se deshace en una montaña de cenizas.
........
Ha quedado una silueta, un fantasma, un recuerdo de Juan aún hablando y de pie y que de a poco levanta otra vez las manos, intentando retomar su discurso.
David, vuelve a asentir con un movimiento débil de su cabeza y con disimulo, retrocede y coge un escobillón que estaba apoyado en la pared y barre del suelo, las cenizas de Juan...
Pobre Juan, desapareció bajo es escobillon
ResponderEliminarMuy bueno, me impresiono la imagen
Un abrazo
Juan y sus cenizas fueron barridos por el escobillón.
Eliminarabrazo
La mosca también ha fallecido. El alma de Juan no da tregua.
ResponderEliminarnesos.
La mosca fucsia también murió con Juan. Creo que la mosca fucsia, luego de penetrar en Juan se hizo un harakiri...
Eliminarnesos
Deberían hacer una representación de este relato en Disneylandia.
ResponderEliminarLos niños la disfrutarían mucho.
Besos.
Creo que no sería conveniente, pues después de verlo, los niños tendrian pesadillas fucsia...
Eliminarbesos
¡¡Que letal esa charla, Lucrecia¡¡¡ Espero que mi camino nunca se cruce con un disertador así de nocivo...
ResponderEliminarUn beso y feliz semana, Lucre
Estos habladores empedernidos son terribles. Solo los silencian las moscas fucsias ... ;-)
Eliminarun beso y feliz semana para ti
ResponderEliminarJodidas plagas de moscas africanas...Son salvajes!! Y carnívoras....
El lenguaje corporal no le gusta?? A veces es mucho más interesante que el hablado signorina.
Es un piacere volver por aquí
Bci tanti
Sicilia
PS: Sigo vivo. Ja
Esta moscas son muy letales. Ante su presencia es conveniente tener la boca cerrada y utilizar lenguaje corporal.
Eliminarbaci
Polvo eres y al polvo volverás... un poco exagerado, como casi todo lo bíblico, pero en este caso particularmente acertado. El caso es que también se aplica para David, la mosca fucsia, el escobillón y nosotros que leemos y escribimos estas líneas.
ResponderEliminarAshes to ashes, cantaría Bowie...
Abrazo ceniciento pero aún vivo!!
Gran verdad la del polvo. Creo que en la Biblia, en el Apocalipsis 2.1, se anuncia la aparición de la mosca fucsia y que nos reducirá a cenizas...
Eliminarabrazo esperanzado
Qué clase de maldita mosca es esa???
ResponderEliminarEs una terrible especie fucsia que ataca a los charlatanes y los reduce a cenizas...
Eliminares un relato genial Lucrecia, lo surreal es total
ResponderEliminarfelicitaciones
has trabajado muy bien la imagen narrtiva
y el acento en esa mosca de color tan peculiar
abrazos y feliz feliz semana
Gracias Elisa, yo soy genial, pero nadie se dá cuenta. Voy a empezar a repartir moscas fucsias por los blogs, para eliminar competidores...
Eliminarabrazos y feliz semana para ti
yo conozco a más de un@ que deberían conocer dicha mosca!!!!
ResponderEliminarSi necesitas te puedo enviar una a Córdoba. Creo que esta semana está libre Sarita, la pecosa...
Eliminarhay personas que no pueden dejar de hablar incluso después de la muerte!!!! qué agotador!!!!
ResponderEliminardespués de barrer que tire un poco de agua!!!
Con unas cuantas mosquitas fucsia, acabas con muchos charlatanes y luego con una buena escoba y un poco de agua, limpias las cenizas...
EliminarFantástico relato ¿surrealista, tal vez?
ResponderEliminarUn saludo.
Gracias Moderato. El surrealismo es algo inexistente o imposible, en este caso, fué real, porque redujo a cenizas al pobre Juan, que le gustaba hablar y gesticular mucho.
Eliminarabrazo
Lucrecia,Magnífico seu relato.
ResponderEliminarEssa imagem é hilariante.
Beijos e ótima semana!
Lucrecia, tengo que releer otra vez el relato, me parece muy complicado de entender.
ResponderEliminar¿Una simple mosca produce tantos efectos.?
No lo entiendo. Ya lo leeré luego otra vez.
Desde luego es que a mi me sacan de quicio las moscas cuando se vuelven muy pesadas, pero jamás vi una de color fusia, yo no la hubiese matado, en ese caso, solo por la singularidad.
Besos.
Y del resto de la historia No me entero de nada, ya volveré luego.
Saludos.
No sé quien es Juan ni David.
EliminarNi si si son los dos la misma personas con dos partes de su personalidad.
No tengo ni idea,y sigo pensango igual que antes, una mosca fusia me llama mucho la atención.
Saludos.
El David podía haber sido más considerado con su amigo y utilizar la aspiradora en vez de ese vulgar escobillón.
ResponderEliminarAdd: Además de esas extrañas manos, el Juan había cruzado los brazos, por lo que se ve.
(la música, estupenda)
Essas moscas deveriam penetrar em muitos ouvidos, principalmente daqueles que fazem promessas que nunca haverão de cumprir. Bjs.
ResponderEliminarPalabras abrasadoras, hieren más que la espada.
ResponderEliminarY pensar que habría bastado la rapidez de un gatito negro como el del widget: se ponen muy juguetones con las moscas fucsias...
Gracias a todos por vuestros valorados comentarios en general y disquisiciones sobre la mortífera mosca fucsia... ;-)
ResponderEliminarabrazo a tod@s