La palabra “ilusión” tiene dos significados diferentes. El primero, es “un concepto, imagen o representación sin verdadera realidad, sugeridos por la imaginación o causados por engaño de los sentidos”. O sea, aquello de Calderón: ¿qué es la vida? Una ilusión, un engaño, una ficción…
Desde este punto de vista, no parece recomendable hacerse demasiadas ilusiones: correríamos el riesgo de ser unos ilusos.
El segundo significado va en la dirección opuesta. Es también ilusión “una esperanza cuyo cumplimiento parece especialmente atractivo.” A esto te refieres cuando hablas de tus sueños para el futuro. Es lo que la filosofía tradicional ha llamado siempre “la pasión de la esperanza”.
Porque, en efecto, la Esperanza no es sólo una virtud: también es una pasión que enciende el alma y el cuerpo.
Santo Tomás asegura, con la seriedad que le caracteriza, que la ilusión es propia de los jóvenes y de los borrachos...